El Presidente Fernández estuvo pendiente de las negociaciones que llevó adelante el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. Existía un único objetivo: lograr que se trate el proyecto la Ley que aprueba el acuerdo con el FMI.
Tras el pedido de la oposición para acompañar, el despacho de comisión fue modificado con un solo artículo y se eliminó el segundo que planteaba la aceptación de la Carta de Intención y el Memorándum de Entendimiento.
Massa se retiró pasadas las 21 de la Casa Rosada a donde concurrió para consultar con el presidente Alberto Fernández sobre la nueva redacción que tendría la iniciativa.
Desde el entorno presidencial comentaron que quién mantenía una posición intransigente respecto a que se debía votar el proyecto tal cual fue enviado por el Poder Ejecutivo era el ministro de Economía, Martín Guzmán, que argumentaba que al directorio del FMI no “le caería bien que no se apruebe”. Algunos off the record dicen «lo mandaron a Houston».