La Organización de las Naciones Unidas (ONU), detectó la presencia de un asteroide que podría impactar en la Tierra y activó, por primera vez en su historia, el Protocolo de Seguridad Planetaria.
Un grupo de científicos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) identificó el objeto y lo bautizó como 2024 YRA. Tiene 90 metros de diámetro y las probabilidades de que choque en nuestro planeta son de 1,5%.
Debido a que son las chances más altas registradas hasta el momento por el organismo, comenzaron a evaluarse estrategias para evitar una tragedia de dimensiones planetarias. La Agencia Espacial Europea (ESA) también interviene en el asunto.
El 2024 YR4 fue descubierto en diciembre de 2024. Los investigadores le otorgaron un nivel 3 en la Escala de Riesgo de Impacto de Turín. Si bien no se trata de una amenaza inminente, igualmente requiere vigilancia y análisis detallados sobre sus movimientos.
Según la agencia espacial estadounidense, el impacto del asteroide podría producirse el 22 de diciembre de 2032. Si bien su impacto no provocaría grandes problemas a nivel global, sí generaría inconvenientes en la zona de impacto.
«El análisis de este asteroide cercano a la Tierra, designado 2024 YR4, indica que tiene más de 1% de posibilidades de impactar con la Tierra, lo que también significa que hay un 99% de probabilidad de que no impacte. Este análisis inicial cambiará con el tiempo a medida que se recopilen más observaciones«, indicó la NASA.
Las medidas de la ONU ante asteroides potencialmente peligrosos
Para estos casos, la ONU cuenta con un protocolo específico para evaluar el asteroide. Esta es la primera vez que se aplica.
Dentro de las medidas adoptadas, se activó la Red Internacional de Alerta de Asteroides (IAWN) y el Grupo Asesor de Planificación de Misiones Espaciales (SMPAG), dirigidos por la NASA y la ESA.
Además, no se descarta enviar una nave espacial para desviar el recorrido del objeto, tal como sucedió en 2022 con la misión DART.
Dónde caería el asteroide
Por el momento, son cinco las regiones en riesgo de recibir el impacto del asteroide: el este del océano Pacífico, el norte de Sudamérica, el océano Atlántico, África y el sur de Asia. Sin embargo, habrá mayores certezas en 2028 cuando el objeto se encuentre a 8 millones de kilómetros de nuestro planeta.