El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, fue agredido brutalmente cuando se hizo presente en una protesta de colectiveros que reclamaban por la muerte de un compañero, víctima de un hecho de inseguridad. Alertados de la presencia del funcionario, los trabajadores comenzaron a increparlo y a atacarlo.
Berni trató de llevar tranquilidad al grupo de gente, informándoles que ya habían atrapado a uno de los sospechosos de haber matado esta madrugada al chofer Daniel Barrientos, en la localidad de Virrey del Pino, partido de la Matanza, mientras conducía el colectivo. Sin embargo, apenas lo vieron, lo insultaron y lo agredieron con palos, piedrazos y golpes de puño.
Paso seguido, el ministro fue rodeado por los propios manifestantes mientras la policía forcejeaba para ponerlo a resguardo. En ese momento, intentó hablar para explicarle que estaba en el lugar para “dar la cara”.
Con el rostro ensangrentado les dijo: «Trabajamos con todos, hicimos todo. Vine a hablar. Recién terminamos de detener a quien supuestamente es el autor…Estoy acá, primero porque entiendo el problema que están pasando todos los días. No hay nadie que venga a poner la cara y me banco la que sea. No salgo corriendo como los demás, estoy acá».
Mientras trataba de dialogar con el grupo de gente enardecida, estos les gritaban “mentiroso” e “hijo de puta”. Finalmente, Berni fue sacado por los efectivos de la infantería de la Policía de la Ciudad, que cubriéndolo con un casco lograron llevarlo hasta un vehículo particular para evitar una nueva agresión.
La muerte del chofer, víctima de la inseguridad
El crimen de Daniel Barrientos, de 65 años, se produjo esta madrugada durante un asalto a bordo de la unidad, en la localidad de Virrey del Pino, partido de La Matanza. Según se supo, tres delincuentes se tirotearon con un efectivo de la Policía de la Ciudad que iba arriba del colectivo, en el medio de la balacera, uno de los disparos impactó en el chofer, causándole la muerte.