En un gesto de solidaridad, seis brigadistas forestales de Tucumán se suman a la lucha contra el fuego en la Patagonia. Los agentes de la Dirección Provincial de Defensa Civil, junto a otros 43 agentes del NOA, partieron hacia el sur del país para colaborar en el combate de los incendios.
Fernando Torres, director de Defensa Civil de Tucumán, destacó la importancia de la participación tucumana en la emergencia. «Nuestros brigadistas estuvieron altamente capacitados para enfrentar este tipo de catástrofes. Tucumán siempre estuvo presente cuando se necesitó ayuda», aseguró
La situación es catastrófica en el sur del país
El fuego, que ya consumió 28.100 hectáreas, sigue arrasando la región. El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, advirtió que las condiciones climáticas podrían empeorar en los próximos días. Mientras tanto, el grupo tucumano viajó desde el Aeropuerto de Catamarca a bordo de un avión de la Fuerza Aérea Argentina. Junto con ellos, otros brigadistas del NOA también se desplazan a la zona para reforzar las tareas.
En la Patagonia, los incendios afectan a varias provincias, incluidos Chubut, Río Negro y Neuquén. En estos lugares, las llamas siguen avanzando con fuerza, amenazando localidades y parques nacionales. A pesar del esfuerzo de más de 500 brigadistas, el fuego no cede. Por ejemplo, el Parque Nacional Nahuel Huapi, uno de los más afectados, ya perdió más de 9.000 hectáreas.
La situación es crítica, especialmente en El Bolsón, donde el fuego avanzó rápidamente, arrasando 3.300 hectáreas y destruyendo viviendas. La comunidad local enfrenta la tragedia con evacuaciones y pérdidas materiales. En respuesta, las autoridades de Río Negro y Chubut redoblan esfuerzos, mientras brigadistas de distintas provincias, como los de Tucumán, se suman al operativo.
El envío de esta cuadrilla refleja el apoyo de Tucumán a la lucha contra los incendios. La colaboración entre provincias es crucial ante la magnitud del desastre. Sin embargo, la lucha no está exenta de dificultades. Las condiciones meteorológicas, como el viento y la sequía, dificultan el trabajo.
A medida que el fuego sigue su curso, los esfuerzos por controlar los incendios aumentan. Las autoridades locales también han lanzado recompensas para encontrar a los responsables de iniciar estos focos. Mientras tanto, las comunidades afectadas siguen recibiendo apoyo de brigadistas y voluntarios.
Fuerte crítica al Gobierno nacional ante la falta de respuesta en la Patagonia
El Gobierno nacional ha enfrentado duras críticas por la falta de apoyo adecuado a los brigadistas forestales que combaten los incendios en la Patagonia. Aunque se han anunciado algunas medidas, como la transferencia de fondos para la reconstrucción de viviendas, el ajuste presupuestario es evidente.
Durante 2024, solo se ejecutó el 22% de los fondos asignados al Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF). Este evidente ajuste afecta directamente a las herramientas y recursos disponibles para los brigadistas.
Además, el traspaso de la administración del SNMF al Ministerio de Seguridad, bajo la dirección de Patricia Bullrich, generó controversias. En este contexto, se discute sobre la efectividad de la respuesta ante la emergencia.
Mientras tanto, los brigadistas, muchos de los cuales están en la primera línea de combate, enfrentan la precarización de su trabajo, con contratos renovados solo por tres meses. Esta situación refleja la falta de inversión y preparación para enfrentar las emergencias climáticas, como la sequía y el calor extremo.
*El Bolsón en llamas: identifican a los presuntos autores del incendio intencional