En vísperas de Navidad, una paciente del Hospital Avellaneda recibió un regalo anticipado, ya que tras siete meses internada, recibió el alta médico.
La mujer, que padecía una enfermedad crónica, recibió atención intensiva en terapia por una patología respiratoria y una enfermedad de base. Estuvo internada desde mayo de este año.
Afectada por una distrofia muscular infantil, la paciente ingresó al hospital cuadripléjica y con dificultades severas para respirar. Gracias al trabajo del equipo de kinesiología y enfermería, logró recuperar funciones motoras esenciales, como usar sus manos, hablar y comer.
«Después de siete meses, puedo volver a mi casa. Estoy agradecida con el equipo médico y especialmente con la doctora Paola por su esfuerzo», expresó emocionada la joven.
El equipo multidisciplinario trabajó intensamente para su recuperación. Los profesionales destacaron la importancia del compromiso de cada uno en las etapas del proceso.
El hospital celebró este logro en un emotivo momento, recordando el valor del trabajo en conjunto y el esfuerzo médico.