Se realizó una reunión para evaluar las consecuencias de la falta de agua de lluvia en la Provincia y cómo afecta a las actividades productivas. La reparación de la presa número tres. Se prevé un monitoreo más minucioso.
La falta de lluvia de los últimos años, sumada a las previsiones meteorológicas que adelantan una fuerte escasez de agua afectan los volúmenes disponibles para la campaña agroindustrial de este año. Además, dañan la cuenca y provocan que absorba mucha agua y no retenga la necesaria, por lo que las lluvias esporádicas no son suficientes.
Esa es la primera conclusión a la que se arribó durante la reunión que se realizó entre la Secretaría de Medio Ambiente y la Dirección de Recursos Hídricos del Ministerio de Desarrollo Productivo de Tucumán.
Durante el encuentro, estuvieron presentes la directora de Recursos Hídricos, Lucía Medina; el secretario de Medio Ambiente, Alfredo Montalván; el subsecretario de Recursos Hídricos, Carlos Giobellina; el subsecretario de Protección Ambiental, Marcelo Lizárraga; el jefe de Distrito III de la DRH, Juan Pourrieux; la directora Regional Norte del Órgano Regulador de Seguridad de Presas (ORSEP), Hebe Barber; Pablo Brahinovih, de Hidroeléctrica Tucumán, Corina Ovejero de Los Balcanes y Alejandro Poviña de Concepción.
La problemática tratada a lo largo de la jornada fue la sequía de la cuenca alta de aporte a El Cadillal, lo que provoca un bajo nivel en el embalse. Además, se habló de la reparación de la presa lateral número tres que también condiciona la cantidad de agua que se acumula en la represa.
Según anunciaron desde la Secretaría de Medio Ambiente, las reuniones se repetirán cada 15 días, sumando actores y coordinando actividad estatal y privada para mitigar las consecuencias de la sequía. Se prevé la realización de un monitoreo más preciso para determinar las consecuencias puntuales de la falta de agua en la zona.