La Justicia procesó este lunes a Alberto Fernández por violencia de género contra su expareja, Fabiola Yáñez. El expresidente fue embargado por $10 millones y podría recibir hasta 18 años de prisión.
El juez federal Julián Ercolini tomó la decisión basándose en las pruebas recolectadas por el fiscal Ramiro Fernández. La medida incluye la acusación por lesiones leves y graves, agravadas por haberse cometido en un contexto de violencia de género y amenazas coactivas. Según el fallo, el expresidente incurrió en «acoso, hostigamiento, insultos, destrato y hostilidad» contra Yáñez.
Además, el juez levantó la prohibición de salida del país que pesaba sobre Fernández. Sin embargo, seguirá vinculado a la causa mientras avanza el proceso judicial.
Hace dos semanas, el exmandatario declaró en Comodoro Py tras varias reprogramaciones. Presentó un escrito de 200 hojas en el que negó haber ejercido violencia física, psicológica o económica contra su expareja. Además, apuntó contra Yáñez y rechazó todas las acusaciones.
Por su parte, la ex primera dama ya declaró por videoconferencia desde Madrid, donde reside con su hijo Francisco. En la causa también testificaron su exsecretaria, la esteticista Florencia Aguirre, su ex amiga Sofía Pacchi, niñeras del menor y médicos que la atendieron en la Quinta de Olivos.
El procesamiento se da en el marco de una investigación que expone una supuesta violencia «habitual y continua» por parte de Fernández hacia Yáñez. La causa ahora avanzará a una nueva etapa, en la que se determinará si el expresidente deberá enfrentar un juicio oral y público.
De confirmarse su culpabilidad, Fernández podría recibir una condena que alcanzaría los 18 años de prisión.
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