La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, arribó el lunes a Tucumán a fin de supervisar las tareas que se llevan adelante en la penitenciaría de Benjamín Paz y en las alcaidías de Delfín Gallo y Las Talitas.
«La nueva cárcel de Tucumán tendrá una capacidad inicial de 900 detenidos, lo que mejorará la situación actual en las comisarías», dijo la funcionaria nacional en alusión a la situación de hacinamiento en que los reos se encuentran tras las rejas.
Bullrich admitió que tenía en agenda desde hacía tiempo su visita a Tucumán para verificar que «los delincuentes estén en cárceles de rigurosa seguridad para que los ciudadanos de bien puedan caminar tranquilos por la calle».
La ministra aseguró estar complacida de que el gobierno nacional ayude a Tucumán a financiar tareas de estas características. «Este es un complejo penitenciario de primera categoría internacional», remarcó.
Plan para bajar los homicidios
La funcionaria también visitó durante la jornada la Agencia Regional Federal NOA-Tucumán de la Policía Federal Argentina (PFA). Allí saludó a los uniformados, que la habían recibido en formación.
Bullrich llamó al personal oficial a “seguir trabajando en plena lucha contra el narcotráfico”. Además, ratificó la implementación del plan de seguridad en Tucumán para bajar la tasa de homicidios.
A su vez, adelantó que se destinarán móviles a la zona de frontera, como Orán, para reforzar la estructura de la Policía Federal Argentina (PFA).
La ex integrante del PRO destacó la importancia de contar con un mapa del delito a fin de anticiparse a los movimientos del crimen organizado. «El trabajo que se está haciendo desde el Consejo de Seguridad Interior, es sumamente importante para el interior».