En el escenario cultural de Tucumán, Catapulta emerge como un espacio de convergencia artística e interdisciplinaria, comprometido con la visibilización de situaciones de vulneración de derechos humanos.
Desde su primera edición en 2019, este festival se ha consolidado como un faro de debate, capacitación y fortalecimiento para el campo audiovisual del Norte argentino.
En su origen, Catapulta se enfocó en la erradicación de las violencias de género y la discriminación hacia mujeres y diversidades, congregando a cerca de 2000 participantes.
Este año, la propuesta se amplía al convocar a organizaciones ambientales, comunidades indígenas del NOA y al público en general, con el objetivo de abordar la problemática ambiental desde una perspectiva social, comunitaria y fundamentada en derechos humanos.
La Fundación ANDHES, Abogadas y Abogados del Noroeste en Derechos Humanos y Estudios Sociales, lidera la organización del festival con respaldo clave del INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales) y Festivales Argentinos, una iniciativa de la Secretaría de Gestión Cultural y la Dirección de Acción Federal del Ministerio de Cultura de la Nación.
El festival no solo implica un aumento en el consumo cultural regional, concientización y promoción del cuidado ambiental, sino también representa una invitación colectiva a reflexionar sobre el papel que la sociedad desea que el Estado cumpla en esta materia.
Antonella Cardozo Casares, productora del festival nos cuenta los detalles en el video.