Después de la derogación de la Ley de Alquileres, impulsada a través del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), propietarios e inmobiliarias se encuentran evaluando la fórmula más adecuada para actualizar los precios de las locaciones.
Con la entrada en vigor de este extenso decreto firmado por el presidente, Javier Milei, los inquilinos se ven obligados a ajustarse a las disposiciones del Código Civil y Comercial. Esto implica que aspectos fundamentales como la duración del contrato, los incrementos de los costos y la moneda de pago serán objeto de acuerdos «libres» entre las partes involucradas.
Fernando Guzmán, presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Tucumán, explicó cuál es la situación del mercado inmobiliario en la provincia. «Se están reduciendo los contratos a 24 meses que la ley anterior le había llevado tres años. Volvemos a los dos años que era antes y, en mayor tendencia, se actualizan cada cuatro meses».
«El índice de actualización que más se está utilizando en Tucumán es el índice de los contratos de locación que los da el Banco Central y después sigue el índice de precio del consumidor (IPC). Son los dos índices más fuertes que se están utilizando ahora a nivel nacional», precisó.
Una encuesta realizada entre corredores inmobiliarios en Tucumán revela que los encuestados han experimentado un aumento en las propiedades en alquiler. Este incremento sugiere que propietarios que previamente tenían sus propiedades en venta han optado por cambiar su enfoque hacia el mercado de alquiler, influenciados por las nuevas disposiciones del DNU.
Fernando Guzmán explicó que la posibilidad de actualizar los contratos en períodos más cortos, como permite el DNU, es vista de manera positiva por los propietarios. Este enfoque les brinda una herramienta más efectiva para adaptarse a la alta inflación de la economía actual.