Raúl Mamaní es el propietario de Yuyo Verde, un bar deportivo y familiar. El negocio comenzó hace nueve años, cuando Raúl en busca de mejorar la situación económica de su familia se animó a emprender en la gastronomía. “Abrí el bar para darle una ayuda a mi familia, estabamos pasando momentos muy complicados de trabajo”, manifestó Raúl.
Junto a sus hermanos comenzaron a investigar el rubro y a trabajar en él. El destino los llevó a alquilar un local comercial recién desocupado en Avenida Perón 2800, Yerba Buena. Así comenzó “Yuyo Verde”, que se convirtió en poco tiempo en uno de los lugares más elegidos por los deportistas que realizan diferentes actividades físicas en la zona.
La multa que paralizó el sueño gastronómico «Yuyo Verde»
El negocio se sostuvo casi una década en la misma locación, hasta que en junio de este año la Municipalidad de Yerba Buena emitió una multa por “invasión pública”. El bar tenía un techo que había sido colocado sobre la vereda. Ante la notificación Raúl se apersonó en catastro y allí le dijeron que la única solución era deshacerse del techo.
“Hace 8 años exactamente hicimos el techo para poder seguir funcionando por las lluvias y el frío, un techo acorde al lugar y sin cambiar la fisionomía y naturalidad de la zona que nos rodea, sin provocar daño ni molestar a la personas”, escribió Mamaní en un descargo que había realizado en sus redes sociales.
El precio de la multa era extravagante y Raúl no quiso perjudicar a los propietarios del lugar, por lo que decidió cerrar el bar. Tras esto la multa fue anulada y el techo se desarmó. “Nosotros no estábamos en regla con el techo y si seguíamos trabajando ahí no podíamos hacerlo sin techo así que decidimos irnos”, comentó. Sin embargo no se dio por vencido y lo reabrió en una nueva ubicación, a tan solo una cuadra de la anterior.
Así es que el 1 de agosto, como si se tratara de una ofrenda a la Pachamama, “Yuyo Verde” reabrió sus puertas en Avenida Perón 2700. Mamaní explicó que cambiar de ubicación implicó un enorme sacrificio ya que no tenía planeado realizar ese tipo de gastos y tuvieron que acondicionar el lugar desde cero ya que no estaba preparado para el rubro gastronómico.
Merienda a futuro, la iniciativa que ayudó a juntar fondos
La gente fue una parte fundamental en la reapertura del bar. No solamente por sus mensajes de aliento y cariño sino también por sus aportes económicos. A través de una iniciativa llamada merienda a futuro, los dueños del local vendían meriendas a un valor de $4000 con la premisa de consumirlo el día de la gran reinaguración.
“La gente me ha ayudado con la merienda a futuro. Pagaban una merienda antes de abrir el bar y una vez abierto la podían consumir”, contó Raúl. Además aseguró que eso lo ayudó a cubrir gastos de personal, insumos, entre otros. Ciclistas, runners, deportistas, clientes y hasta gente de otras provincias como Buenos Aires, Salta y Jujuy se sumaron a la iniciativa de la merienda a futuro para colaborar.
Nueva ubicación, mismos productos y servicios
En su nueva ubicación, Raúl cuenta que la gente está respondiendo muy bien porque el lugar es mucho más amplio y queda tan solo a una cuadra del anterior. Aunque el ambiente y la locación se renovó, Yuyo Verde sigue ofreciendo los mismos productos 100% naturales y saludables.
La carta está compuesta por desayunos y meriendas que incluyen licuados y frutas frescas de estación. Además cuentan con panificación propia y elaboran panes integrales sin aditivos y conservantes. Un 80% de las opciones están abocadas a lo que necesitan los deportistas antes y después de entrenar.
Además de esto, Yuyo Verde brinda un servicio a la comunidad deportiva, turistas y visitantes. Quienes pasen por ahí pueden utilizar los baños sin cargo así como también cargar agua para el mate, estacionar bicicletas y motos o dejar en lockers elementos personales antes de emprender caminatas por los senderos o realizar algún tipo de actividad deportiva. Todo esto gratis, sin necesidad de consumir.
El bar ya está funcionando nuevamente por lo que familia, amigos, deportistas y no deportistas pueden disfrutar de exquisitas meriendas saludables y de un lugar al servicio de la comunidad.