“No hay tiempo para el gradualismo” y “no hay plata” son dos de las frases que quedaron resonando del discurso presidencial. Javier Milei hacía referencia así a la necesidad de adoptar medidas fuertes y contundentes para recuperar la economía del país.
Si bien se esperan para esta tarde los anuncios oficiales del ministro de Economía, Luis Caputo, durante la campaña y la asunción se dieron algunas pistas. Recorte fiscal y devaluación del peso serían algunas de las disposiciones del nuevo gobierno. Además, se trabaja en una “ley ómnibus” para aplicar las medidas de shock. El objetivo de este paquete económico es evitar la hiperinflación, según dijeron desde el entorno del presidente.
No es la primera vez que Argentina debe acudir a medidas de emergencia y salvataje. En la historia reciente figuran las crisis de 1989 y de 2001. “En ambos casos se aplicaron medidas de shock y fueron exitosas”, dijo la licenciada en Economía, Constanza Almirón, en TV Prensa Segunda Emisión.