Imparables lluvias han provocado una catástrofe en Valencia y en zonas aledañas durante estos últimos días. La situación no parece mejorar.
La cifra de muertos alcanza ya los 158, siendo 155 fallecidos solo en la Comunidad Valenciana, dos en Castilla-La Mancha y uno en Andalucía.
Las precipitaciones, que llegaron acompañadas de fuertes vientos y tornados, fueron provocadas por un fenómeno meteorológico conocido como Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA).
Este desastre, considerado el más grave en décadas, ha generado destrozos en viviendas, cortes de energía, y bloqueos en la red de transporte.
Valencia y alrededores está tapada de barro por las inundaciones: hay autos y objetos arrastrados por las fuertes corrientes, y en medio del caos se reportaron incendios.
Ante la gravedad de la situación, equipos de emergencia han desplegado operativos de rescate en toda la región con drones y helicópteros para rescatar a los ciudadanos.
La intensidad de la tormenta arrasó infraestructuras y dejó a cientos sin hogar. La crecida de los ríos agravó la situación, forzando a muchos habitantes a evacuar de emergencia.
Servicios interrumpidos por las inundaciones
Las lluvias han causado la suspensión del servicio de trenes y han obligado a cancelar o desviar varios vuelos en el aeropuerto de Valencia. Los colegios también suspendieron sus actividades, mientras las autoridades instan a la población a mantenerse en refugios seguros hasta que la situación se estabilice. La línea de tren entre Madrid y Valencia se encuentra cerrada, complicando aún más el acceso a la región
Las autoridades temen que la cifra de muertos y desaparecidos aumente debido a la magnitud del desastre, que ya es el peor desde las inundaciones de 1973 que cobraron 300 vidas. España declaró tres días de luto por las víctimas fatales.