El Departamento de Trabajo de Estados Unidos (USDOL) ha retirado a los arándanos argentinos de su lista de productos asociados al trabajo forzoso. Esta decisión es un avance clave para la industria del arándano en Argentina, especialmente en Tucumán, donde esta actividad tiene gran relevancia.
El programa Buena Cosecha, impulsado por el Gobierno de Tucumán, fue crucial para lograr este cambio. La eliminación de los arándanos de la lista es el resultado de un esfuerzo coordinado entre varios organismos nacionales y regionales. El objetivo de esta colaboración fue garantizar condiciones laborales justas y erradicar el trabajo infantil en el sector.
El informe anterior del USDOL había señalado que el trabajo infantil era común en la producción de arándanos, particularmente en Tucumán, Entre Ríos y Buenos Aires. Según el informe, se detectaba que niños eran escondidos durante las inspecciones y se observaba un aumento en las ausencias escolares durante la cosecha. Sin embargo, la actualización más reciente del gobierno estadounidense reconoce que estos problemas se han abordado y que el sector ya no está asociado con el trabajo forzoso.
Dignidad laboral como política pública
Este logro fue posible gracias a la colaboración entre diversas instituciones. El Gobierno de Tucumán, a través de su Secretaría de Producción y el Ministerio de Desarrollo Social, trabajó junto con el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE), la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, la Fundación DyA y la Cámara de Arandaneros. Estos actores diseñaron políticas para garantizar condiciones laborales dignas y combatir la explotación en el campo.
El compromiso de estos organismos fue clave para establecer una línea clara a favor del trabajo decente, no solo en la producción de arándanos, sino también en otras economías regionales. Con la eliminación de los arándanos de la lista de bienes producidos con trabajo forzoso, Argentina avanza hacia una producción agrícola ética y sostenible.
¿Qué es el trabajo forzoso?
El trabajo forzoso implica la coerción para realizar tareas, ya sea mediante la retención de salarios, la amenaza de sanciones o la explotación infantil. En el caso de los arándanos, este problema afectaba a menores que trabajaban en condiciones inadecuadas, alejándolos de la escuela y de sus derechos básicos. La erradicación de estas prácticas en el sector arandanero es un avance significativo hacia el respeto de los derechos laborales.
Este reconocimiento internacional subraya la importancia de seguir trabajando para que todas las actividades agrícolas en Argentina cumplan con estándares laborales que aseguren justicia y bienestar para los trabajadores.