Una encuesta que realizó la Unión Industrial Argentina (UIA) mostró que las fábricas nacionales profundizaron la crisis de actividad ante la depresión del mercado interno. También sienten las dificultades de las empresas para exportar.
Es una triste realidad. En nuestro país continúan los despidos de trabajadores ante la recesión. Dejó de ser un problema de las pymes para alcanzar a las grandes empresas argentinas: no poder afrontar sus costos.
La caída de la actividad industrial fue en abril, en relación al mes pasado (marzo), de un 5 %. En este contexto, nada parece indicar que el sector privado vaya a repuntar en los próximos meses.
La contracción de la actividad quedó demostrada a partir de la ponderación de los resultados para la producción, el empleo y el tiempo de entrega. “El resultado obedece a que en la mayoría de los indicadores se observaron datos contractivos”, indica el informe.
El texto, además, precisa que el 53 % de las empresas encuestadas enfrentó caídas de la producción, un 60 % caída en las ventas y un 24 % baja en los empleos.
