Ayer, un fuerte temporal azotó varias zonas de Tucumán, causando lluvias intensas y vientos fuertes. Burruyacú fue la región más afectada, con 60 milímetros de lluvia acumulada, según informó Defensa Civil. Este fenómeno se produjo en áreas como El Cajón y San Vicente, localidades ubicadas a unos 60 kilómetros al noreste de San Miguel de Tucumán.
Fernando Torres, titular de Defensa Civil y miembro del Comité de Emergencia de Tucumán, detalló que se activó una alerta naranja en la tarde de ayer. La alerta se mantuvo hasta la medianoche, mientras lluvias y ráfagas de viento golpeaban tanto la zona de Burruyacú como el pedemonte cercano.
En Santa Ana, los vientos derribaron un árbol de gran porte, aunque sin causar daños mayores. El equipo de Defensa Civil trabajó de inmediato para despejar el área y evitar otros incidentes. Además, Torres confirmó ráfagas significativas en La Cocha, donde los efectos fueron moderados.
El temporal también provocó cortes de energía en Chicligasta, Graneros, Tafí Viejo y la Capital. En estos lugares, la acumulación de agua fue menor, apenas alcanzando los 7 milímetros de lluvia. La empresa distribuidora de electricidad ya está trabajando para restablecer el servicio en las áreas afectadas, aseguró el funcionario.
Torres agregó que, hasta el momento, no se reportaron inundaciones ni evacuaciones en las zonas afectadas, según los informes que Defensa Civil recibió de las distintas áreas de la provincia. La situación, aunque complicada, estuvo controlada sin mayores incidentes.