Los tucumanos revelaron que sufrieron un cambio significativo en los hábitos de consumo, con ajustes y adaptaciones para enfrentar la incertidumbre financiera y económica. Hay una mayor cautela en el gasto, con una tendencia hacia productos y servicios más económicos y de primera necesidad.
En diálogo con TV Prensa, una tucumana dijo: «Para poder adaptarnos a esta situación, empezamos a ajustarnos, por ejemplo, en la frecuencia de las salidas a bares. Ya no es como antes en comprar cosas no tan necesarias, como ropa. En los productos alimenticios, no se resignan las primeras marcas, eso se compra en menor cantidad quizás que antes».
Sin embargo, un tucumano sigue con su vida habitual: «Nosotros somos dos. Los dos tenemos un buen trabajo y estable, así que por ahora no recortamos nada. Salidas a bares, viajes, todo lo que podemos, lo hacemos con normalidad».
Pero otro entrevistado aseguró que hace algunos recortes con esperanzas de que el escenario mejore: «Antes íbamos al supermercado, llenábamos un changuito, dos changuitos. Ahora, lo justo y necesario para la semana. Vamos a ver si este gobierno no nos miente y podemos, dentro de un tiempito, estar como pretendemos. Es el sacrificio que estamos haciendo para ver si salimos adelante»-
