El mundo del fúbtol está de luto. Franz Beckenbauer falleció este lunes a la edad de 78 años tras padecer una enfermedad que lo mantuvo fuera de la vida pública en los últimos meses. «El kaiser» fue una de las leyendas del fútbol alemán, con una carrera plagada de premios y reconocimientos. Ganó el Mundial como jugador en 1974 y como seleccionador en 1990 (vence a Argentina en la final por 1-0), una Eurocopa (1972), tres Copas de Europa consecutivas (1974-1977) y dos Balones de Oro (1972 y 1976).
Beckenbauer llegó a ser Balón de Oro de Europa en 1972 y 1976 y se encuentra tercero en el ranking como el mejor futbolista del siglo XX por la Internacional de Historia y Estadísticas de Fútbol (IFFHS). Además, en diciembre de 1993 fue electo como segundo mejor futbolista de la historia de las Copas del Mundo, en una votación con más de mil periodistas. Hasta hoy se había desempeñado como presidente honorario del Bayern Munich.
«Me hubiese gustado viajar, pero mi salud no me permite realizar viajes largos», declaró Beckenbauer en un comunicado poco después del fallecimiento de Pelé, tras no poder asistir al funeral de ‘O Rei’. Hace algunos meses, el ídolo reconoció públicamente haber perdido la visión en su ojo derecho. Los médicos, además, le habían recomendado evitar los viajes largos ante sus problemas cardíacos.
Franz Anton Beckenbauer nació apenas terminaba la Segunda Guerra Mundial en una Alemania desvastada y ocupada. Se crió en la región de Bavaria y vivió los tiempos de la reconstrucción y autocrítica.
Cuando le preguntaron al jugador y entrenador cuáles eran los secretos de su expecional carrera, respondió: “Para ser exitoso como jugador, entrenador y dirigente hay que tener mucha disciplina, bastante suerte, y nacer en el país y en el momento justo”.