En esta oportunidad fue el turno de la familia Gramajo, cuyos restos ancestrales se encuentran en el cementerio del Oeste, el «cementerio de los ricos». Allí descansa el padre de familia, Julio, el hombre que aparentemente habría adquirido las parcelas y levantado el monumento. Pero los vándalos, que no conocen de límites, rompieron una puerta de hierro maciza e ingresaron.
Ya en el mausoleo, destrozaron cajones y esto despertó el enojo de los familiares, quienes contaron que tuvieron que molestar a otras personas para trasladar los cuerpos que quedaron sin sostén. María Racedo es familiar de los difuntos y relató con ira los acontecimientos a Canal 10. Al mismo tiempo comentó que una puerta tan pesada «no pudo haber sido sacada por una sola persona. Fueron varios», sentenció.
En los cementerios, especialmente donde los monumentos son más ostentosos que el municipal (por caso), hay serenos hasta las 18 horas, según explicó María a Tv Prensa. Cobre, bronce, mármol, hierros de altísimo valor; todo eso puede encontrarse en un pequeño espacio donde los que partieron descansan en paz.
Según informó María, este viernes radicaron la denuncia policial y judicial para que los pesquisas logren dar con los delincuentes.