La futbolista marroquí Nouhaila Benzina se convirtió en la primera jugadora con hijab en jugar un Mundial, en uno de los hitos históricos de la Copa del Mundo Femenina que se juega entre Australia y Nueva Zelanda, para un partido celebrado en el Hindmarsh Stadium de Adelaida.
La futbolista de 25 años juega en el Royal Army Football Club (FAR) de Marruecos, y se incorporó a la selección nacional marroquí en 2018. Disputó su primer cotejo como titular en la Copa del Mundo Femenina 2023.
Marruecos se convirtió en el primer país norafricano y árabe en participar en la final del torneo continental, Wafcon (Copa Africana de Naciones, en español) al vencer a Nigeria, y así lograr el pase al Mundial.
La FIFA prohibió el uso de cualquier tipo de velo por considerar que la prenda era «un riesgo para la seguridad». Luego levantó la prohibición, pero numerosos países y federaciones aún prohíben a sus jugadoras el uso del hijab.
La defensa marroquí no había jugado el primer partido contra Alemania, pero fue titular en Adelaida este domingo en la victoria contra Corea del Sur (1-0), la primera de Marruecos en un Mundial femenino.
El hijab es un velo que cubre la cabeza y es parte de la identidad de algunas mujeres musulmanas.
Marruecos venció este domingo a Corea del Sur, en un juego celebrado por el Grupo H, con gol de Ibtissam Jraïdi.
Fuente: TELAM