El ministro de Economía, Daniel Abad, selló un pacto crucial con la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT). Por el sector privado pusieron la firma Daniel Orell y Jorge Berreta. El convenio tiene como objetivo abordar los desafíos en el transporte de la provincia. Esto implica una asistencia excepcional de 90 días, condicionada a la regularización del servicio, la prevención de despidos y la colaboración en el control de subsidios.
Durante la reunión, Abad resaltó el compromiso de la provincia para con los usuarios del transporte público. En este sentido reconoció los problemas derivados de la falta de resolución a nivel nacional sobre los subsidios para el sector. Por eso, para brindar una respuesta a esta problemática, se acordó un respaldo financiero extraordinario por un período de 90 días. La ayuda estará sujeta a la disponibilidad de fondos en la tesorería.
El pacto establece tres condiciones fundamentales: La normalización del servicio. La ausencia de despidos durante el período de 90 días. Y una colaboración mutua con un control estricto en la asignación de los fondos de subsidios provinciales.
Berreta, presidente de AETAT, subrayó la importancia del acuerdo para garantizar la continuidad del transporte, describiéndolo como vital e indispensable para todos los tucumanos.
El pacto permitirá una evaluación diaria de las operaciones de transporte, asegurando que el servicio se preste cubriendo los gastos básicos. Se trata de un esfuerzo conjunto, que tiene como propósito el funcionamiento de las líneas de colectivos. Así también, como evitar futuras medidas de fuerza por parte de los trabajadores nucleados en el gremio de UTA.
El servicio de la capital
Berreta expresó su inquietud por la falta de soluciones desde la Municipalidad. Señaló que “el sistema de transporte está al límite para brindar el servicio necesario”.
