El Complejo Penitenciario de Benjamín Paz, ubicado en Trancas, fue inaugurado este jueves por el gobernador Osvaldo Jaldo. La primera etapa habilitada incluye cuatro pabellones que buscan aliviar el hacinamiento en las comisarías tucumanas.
Jaldo señaló que la obra enfrentó múltiples desafíos a lo largo de su construcción. “Este complejo vivió cambios de gobiernos y momentos económicos difíciles. Por eso es un logro importante haberlo terminado”, afirmó.
El nuevo centro penitenciario tiene capacidad para recibir a detenidos desde las primeras horas de su apertura. El gobernador subrayó que esto ayudará a que la policía vuelva a concentrarse en tareas preventivas. “Las comisarías no son para tener presos. Los policías deben cuidar a los tucumanos, su seguridad y sus bienes”, explicó.
Detalles del avance y proyección de la obra del nuevo complejo
El proyecto completo contempla ocho pabellones. En este sentido, la construcción inicial alcanzó el 30%. Según Jaldo, los aportes provinciales permitieron finalizar esta primera etapa, y se proyecta inaugurar el resto en 2026.
“Es una política carcelaria prioritaria en Tucumán. Mientras otras provincias enfrentan paralización de obras, aquí decidimos avanzar”, destacó el mandatario.
Además, el complejo cumple con estándares de seguridad nacionales e internacionales. “Dotamos esta cárcel con tecnología avanzada para evitar comercialización de drogas, peleas o planificación de delitos desde dentro”, agregó Jaldo.
Impacto político y social
La inauguración contó con la presencia de legisladores de distintos partidos, jueces y funcionarios del Poder Judicial. Finalmente, Jaldo resaltó la importancia del consenso para avanzar en obras de esta magnitud.
“Esta cárcel no es promesa, es una realidad. Hoy dimos el primer paso para solucionar el problema carcelario en la provincia”, concluyó el gobernador al dejar inaugurado el complejo penitenciario.
