La Unión Tranviarios Automotor (UTA), a nivel nacional, confirmó anoche su adhesión al paro del jueves 9, impulsado por la CGT. Sin embargo, la filial del gremio en Tucumán expresó que este martes por la mañana tomará una decisión en este sentido. César González, deberá decidir si sigue el mandato gremial o accede al pedido del gobernador Osvaldo Jaldo, de prestar servicio.
UTA asegura, en el texto, que: «como consecuencia de las medidas del Gobierno Nacional tomadas directamente en contra el Pueblo trabajador y orientadas a vulnerar derechos individuales básicos, La Unión Tranviarios Automotor se suma al reclamo de toda la sociedad».
No es un dato menor que el máximo referente de UTA, Roberto Fernández, quien no suele plegarse a las medidas de fuerza, sí lo haga a esta, el próximo jueves. Será porque los choferes del transporte público de pasajeros tampoco atraviesan momentos de bonanza económica:
En el comunicado publicado por la UTA se solicita a las autoridades que tomen medidas concretas a los problemas que hoy padecen los argentinos. «Reflexionen, comprendan el alcance de estar sentados en un sillón presidencial o de diputado o senador. Cumplan la Constitución», exigió UTA en el texto que lleva la firma de Fernández.