El transporte público de pasajeros se encuentra en jaque y esto no es una novedad. Los dueños de las líneas de colectivo, agrupados en la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) aseguran que ningún aumento que pudiera otorgárseles, sería suficiente para hacer frente a esta «inflación desmedida».
La crisis impidió que los empresarios pagaran el aguinaldo en tiempo y forma. Según la ley vigente, el plazo vencía el 18 del mes en curso. En tal sentido Jorge Berreta reconoció la falta de respeto en la que incurrieron y que cada empresario le explicó, de frente, a cada chofer el motivo por el cual no se podía cumplir con ese derecho.
«La próxima semana tendremos una reunión con el gobernador Osvaldo Jaldo y, es muy probable, que el inconveniente esté subsanado», adelantó Berreta.
Abonar el SAC a los empleados de todas las empresas requiere una erogación de $1.100 millones, cifra que el Ejecutivo Provincial estaría dispuesto a ceder una vez más.
Una crisis que no es nueva
Según explicó el vicepresidente de AETAT a Canal10Digital, desde el gobierno de Mauricio Macri el transporte empezó a «descapitalizarse». Según Berreta hace siete años que no invierten en coches nuevos y que tampoco reparan los que salen a la calle.
«Más aún», continuó el empresario: «lo que recaudamos de pasaje o boleto hoy, no nos alcanza para la totalidad de gasoil que necesitamos para trasladar a los pasajeros. Es de locos», lamentó.
El directivo de AETAT reiteró al transporte público en Tucumán «siguen poniéndole parches». «Hablamos con gente de la Nación, pero recién se están acomodando, mucho no esperamos. Vamos a pedir reunirnos con la intendenta Rossana Chahla, teniendo en cuenta que el municipio es responsable también de esto. Y seguramente será el gobernador el que nos ayudará a paliar esta situación», relató Berreta.