Los restos de Tomás Tello, el joven de 18 años apuñalado en medio de un ataque de una patota fueron enterrados en el cementerio de Mar de Ajó. Centenares de vecinos y amigos acompañaron a sus familiares en el cortejo fúnebre.
Samanta, la madre de Tomás, exigió justicia en la puerta de la casa de sepelios. «Quiero que todos paguen, que todos vayan presos y que todos tengan perpetua», expresó. El cuerpo de su hijo fue entregado minutos antes de las 16:30 de ayer y se procedió a la inhumación sin velatorio.
La mujer, embarazada y a punto de dar a luz en nueve días, agradeció el apoyo del Ministerio Público Fiscal y la Municipalidad. “Yo siempre le decía que se cuide, que se acuerde de lo que le pasó a Fernando (por Báez Sosa, asesinado por una patota en 2020 en Villa Gesell).
“Como mamá, solo puedo hablar de cómo era mi hijo. Era lo más tierno que vi en la vida. Muy dulce. Te daba esos abrazos de oso y me contaba todo”, relató la mujer.
Samanta hizo un llamado a los testigos a brindar información y cuestionó la falta de presencia policial en la playa donde ocurrió el ataque. «No lo puedo creer», concluyó entre lágrimas.
Una caravana de más de 50 autos y 15 motocicletas se dirigió hacia el cementerio en Mar de Ajó, acompañada por personas a pie. La hermana de Tomás, Camila, viajaba en un auto blanco con una bandera que decía «Aguante Tellito, Te amo, gordo».
El coche fúnebre se detuvo frente a la casa del joven por cinco minutos, luego continuó hacia el cementerio, donde se llevó a cabo una breve ceremonia antes de la inhumación.
El asesinato de Tomás
En la madrugada del Año Nuevo, Tomás Tello, un joven de 18 años, fue brutalmente apuñalado por una patota en la costanera de Santa Teresita. Mientras celebraba con amigos, fue perseguido por un grupo de personas, algunas de ellas menores de edad. A pesar de sus intentos de escape, fue interceptado y atacado con golpes y al menos un arma blanca.
Tomás, originario de Mar del Tuyú, sufrió una grave herida en el tórax durante el ataque. Aunque fue llevado de urgencia al hospital local, no pudo sobrevivir a sus heridas.
La policía detuvo a 10 personas en relación con el crimen, incluyendo a dos menores de edad. Los arrestos se realizaron minutos después del incidente, gracias a imágenes de cámaras de seguridad que mostraban a los agresores intentando huir por la playa.