La eliminación de las SIRA es un alivio para el flujo normal de vehículos y partes, pero la apertura de las importaciones es un cambio del mercado. Si bien ahora se pueden traer modelos a discreción, el arancel del 35% y del 17,5% del impuesto PAIS sigue siendo una protección para los vehículos nacionales o regionales.
“Sólo podemos ofrecer este modelo (señalando uno de los económicos de la marca) porque los de más alta gama están en el puerto. Nos dejan sacar tan pocos autos que tenemos que traer los que se venden más por su precio”. La frase la dijo un importador a finales de 2022 y representa el freno que tenían los importadores para traer los modelos que querían comercializar en Argentina.
No obstante esta modificación sustancial para el mercado automotriz, genera en algunos expectativas muy positivas, pero en otros dibuja un panorama desolador. Desde una concesionaria local, cuyo gerente pidió no revelar su identidad, reconocieron que se evalúa cesantear a 20 empleados, al menos.
Este tipo de situaciones hicieron que incluso se postergaran lanzamientos para este mes de diciembre o comienzos de 2024, lanzamientos de modelos que estaban en agenda pero no se podían concretar.