Daniel Noboa, de la alianza Acción Democrática Nacional, se impuso en la segunda vuelta, y se convirtió en el presidente electo de Ecuador. Con un 52,3% de los votos, superó a la candidata correísta, Luisa González, de Revolución Ciudadana (RC), que obtuvo el 47,7%.
Este triunfo hace de Noboa el presidente más joven en la historia de Ecuador, asumiendo el gobierno hasta mayo de 2025. A pesar de tener solo dos años de experiencia política como asambleísta, Noboa logró asegurar la jefatura del Estado. Algo que su padre, considerado uno de los hombres más ricos del país, nunca pudo lograr con cinco derrotas electorales.
La candidata de Revolución Ciudadana felicitó a Noboa y reconoció su derrota, como parte del proceso democrático.
En sus primeras declaraciones, el presidente electo expresó su compromiso con un Ecuador seguro y próspero. «Hoy hemos hecho historia, las familias ecuatorianas eligieron el nuevo Ecuador. Eligieron un país con seguridad y empleo», afirmó Noboa.
Esta victoria también marca un giro en la política ecuatoriana, ya que en 2006 el padre de Daniel Noboa perdió en la segunda vuelta ante el expresidente Rafael Correa. Esta vez, Noboa derrotó a la candidata respaldada por Correa.
El presidente electo asumirá en diciembre, y su mandato enfrentará desafíos significativos. Entre estos se incluyen altos índices de inseguridad y problemas socioeconómicos como la pobreza y el desempleo. Además, la Asamblea Nacional estará fragmentada, lo que requerirá negociaciones y consensos para avanzar en la agenda legislativa.
Ecuador, un país en crisis
A sus 35 años, Daniel Noboa , deberá gobernar un país complejo: crisis social, política, económica y una violencia inusitada. Su experiencia académica en Administración y Comunicación, junto con su enfoque en un «nuevo Ecuador» sin corrupción, resonó con los votantes y lo llevó a la victoria.
La fecha exacta de su asunción está pendiente, pero se espera que ocurra en diciembre. Noboa, dedicado al deporte y la vida saludable, enfrentará la tarea de liderar el país en un periodo crucial.
