Llegó el 2 de mayo tan anunciado por los panaderos y con este día, una suba en precio del kilo del producto. Fernanda Zóttola, vicepresidenta del Centro de Industriales Panaderos de Tucumán, admitió haber hecho números finitos junto a sus pares para que la suba del 10 %, tenga un menor impacto en el bolsillo de la gente.
A este ajuste también se lo sentirá en los valores de las especialidades, lo que incluye facturas, medialunas y a veces también masitería. Zóttola manifestó que «Va a haber un aumento en todos los productos panificados, más allá de que tomemos el precio del pan como referencia», agregó.
«En el precio final de un producto, un 50% es impuestos. Es tan alta la carga impositiva; no sólo de luz, sino también los sueldos y otros ítems que hacen que la rentabilidad del pan sea cada vez más baja», lamentó la comerciante.
Este ajuste también impactará en los valores de las especialidades. «Va a haber un aumento en todos los productos panificados, más allá de que tomemos el precio del pan como algo simbólico», agregó.
Zóttola dijo que hoy, «en el precio final de un producto, un 50% es impuestos. Es tan alta la carga impositiva, no sólo de luz, sueldos y otros, que hacen que la rentabilidad del pan sea cada vez más baja».
Por último, la mujer indicó: «A la gente no le alcanza para comprar pan, algo tan básico y que es muy preocupante. Tenemos una carga social muy grande pero con expectativa de poder seguir manteniendo las fuentes de trabajo, por lo menos en los próximos meses», concluyó la mujer.