Este viernes, el Gobierno de Javier Milei presentó formalmente ante el Congreso la Ley Hojarasca. El proyecto que busca eliminar cerca de 70 leyes. El Ministerio de Desregulación anunció que estas normativas son vistas como un obstáculo a las libertades individuales y que han afectado el derecho a la propiedad durante años. El gobierno ya remitió el texto al parlamento para su tratamiento.
Desde esta cartera, a cargo de Federico Sturzenegger, explicaron que gobiernos militares y presidencias como las de Isabel Perón, Jorge Videla y Raúl Alfonsín sancionaron muchas de las leyes que ahora buscan derogar. El comunicado oficial afirma que esas normativas «ya no tienen sentido o fueron superadas por leyes más actuales». Además, aseguran que la Ley Hojarasca quiere crear «un cuerpo jurídico más reducido y ordenado» para mejorar la justicia en Argentina.
Sturzenegger aseguró que la propuesta se basa en un estudio exhaustivo de las leyes vigentes. Detalló seis motivos clave para avanzar con estas derogaciones. Estas son: la existencia de leyes que limitan la libertad individual, la eliminación de trámites inútiles, la superación de normativas por otras más modernas. Además, también se mencionan los cambios tecnológicos que volvieron obsoletas ciertas reglas, la desaparición de instituciones para las que se habían creado algunas leyes, y la existencia de organismos que deberían autofinanciarse.
El proceso legislativo de la Ley Hojarasca iniciará con su presentación ante las comisiones del Congreso. Luego, se debatirá tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado. Para su aprobación, se requiere la participación de una mayoría absoluta, es decir, al menos 129 diputados de los 257 que conforman la Cámara baja. Si se alcanza el quórum, la votación será por mayoría simple, excepto en casos especiales que requieran un mayor consenso