El Gobierno nacional anunció que otorgará un bono de $55.000 en enero a los jubilados que perciben el haber mínimo. De esta forma, se eleva el piso de remuneración a alrededor de los $160.000, según fuentes oficiales.
Esta cifra se asemeja al bono entregado por la ANSES en diciembre tras la aplicación del último aumento trimestral del año, que ascendió a un 20,9%, llevando la jubilación mínima a poco más de $105.000.
El pago de este bono se extenderá también durante febrero, siempre y cuando el Congreso dé su aprobación al capítulo de la Ley Ómnibus que propone la suspensión de la actual fórmula de movilidad. Tanto en el Ministerio de Economía como en el de Capital Humano, consideran que esa fórmula sistemáticamente pierde frente a la inflación y buscan modificarla.
El primer paso en este proceso implica la derogación de la fórmula actual, un aspecto crucial de la Ley Ómnibus presentada ante el Congreso el miércoles pasado. En caso de que esta medida prospere, el Poder Ejecutivo nacional implementará un esquema de aumentos mensuales discrecionales, ajustados a la inflación del mes anterior, para evitar pérdidas de poder adquisitivo por parte de los jubilados.
