Desde el 1 de abril se verá en las pizarras de las estaciones de servicio de todo el país un aumento en el precio de los combustibles. La suba ya estaba estipulada debido a la actualización, en 3 etapas, del impuesto a las naftas. En cifras, las naftas subirían aproximadamente $30 por litro y el gasoil o diésel, $25.
La nafta Súper de YPF que con el último aumento quedó en $859, pasaría a $897 y la Infinia Nafta costará $1.094 si se respeta ese porcentaje.
El presidente de la Cámara de Comerciantes de Derivados del Petróleo, Gas y Afines (CAPEGA), Sebastián Vargiu, afirmó que «hay que esperar hasta el domingo o el mismo lunes para conocer si las petroleras indexarán o no a la suba del 4 % las «mini devaluaciones» que registró la economía argentina». En tal sentido, el empresario dijo: «entonces las naftas subirían, realmente, un 7 % aproximadamente».
Vargiu coincidió con sus pares en que la venta minorista del sector sufre el mismo efecto recesivo que el resto de las actividades del país, exhibiendo caídas de un 10 % en lo que va del año y, en el caso de los productos premium, hasta un 30 %. «Esta nueva suba puede acentuar aún más esta tendencia», manifestó en diálogo con Canal 10 Digital.
