Durante el rezo del Ángelus dominical desde el Palacio Apostólico, el Papa Francisco expresó su profunda preocupación por el sufrimiento en Palestina e Israel debido a las hostilidades en curso en la Franja de Gaza. Instó a acelerar las negociaciones para un cese del fuego «inmediato» entre Israel y Hamás. Además hizo un llamado tanto a la liberación de rehenes israelíes como al acceso «urgente» del pueblo palestino a la ayuda humanitaria.
El Pontífice condenó las consecuencias devastadoras del conflicto. El enfrentamiento dejo miles de muertos, heridos y desplazados, causando un sufrimiento particularmente doloroso para los más pequeños e indefensos. A pesar de enfrentar problemas de salud, el Papa pudo llevar a cabo su discurso frente a los fieles congregados en la plaza de San Pedro.
«¿Se piensa de verdad construir un mundo mejor de este modo? ¿Se piensa de verdad en alcanzar la paz? ¡Basta, por favor! ¡Frenen!», exclamó Francisco, instando a un alto inmediato de las hostilidades que iniciaron el 7 de octubre, provocando más de 30,000 muertes hasta la fecha.
Además, en un esfuerzo por brindar asistencia humanitaria, las fuerzas estadounidenses lanzaron paquetes aéreos con medicinas y alimentos sobre la Franja de Gaza el sábado pasado. Esta acción fue coordinada por Jordania, que ya había contribuido con entregas de alimentos, agua y medicamentos. Estos cargamentos fueron para aquellos que se vieron obligados a abandonar sus hogares debido a los bombardeos y buscar refugio en campamentos.
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