La crisis humanitaria en la Franja de Gaza se profundiza a medida que avanzan los días y se intensifican los ataques en el marco de la guerra que se desató luego del ataque de Hamas a población civil de Israel. Se cumplen ya cinco días desde aquel asedio sin precedentes.
El organismo para la alimentación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió que en Gaza hay comida para cuatro o cinco días. «En las tiendas, las reservas (de comida) son de algunos días, tal vez cuatro o cinco días», indicó a la prensa en Ginebra Abeer Etefa, una portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PMA).
La situación se torna más compleja debido a la imposibilidad de acordar la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. «A las tiendas les está resultando extremadamente difícil reabastecer sus almacenes», continuó la portavoz.
Sin agua ni electricidad
El grave contexto que viven los habitantes de la Franja de Gaza por la inminente falta de alimentos podría profundizarse con la escasez de agua. Sucede que los bombardeos han dañado la infraestructura sanitaria y de electricidad, por ende no se pueden operar bombas y plantas potabilizadores. Además, hay faltante de combustible y los proveedores de agua israelí no pueden llegar a la zona.
Una tregua
Desde que comenzó la contraofensiva israelí en territorio palestino han muerto 2750 personas, en su mayoría civiles. En tanto, el grupo islamista Hamás mantiene como rehenes a decenas de israelíes.
Los llamados a la paz o, al menos, para establecer una tregua para asistir a la población afectada por la guerra son incesantes.
Una treintena de expertos en derechos humanos y cuatro grupos de trabajo condenaron inequívocamente los ataques a la población civil por todas las partes en conflicto, recordando que “no hay justificación para la violencia dirigida indiscriminada contra civiles inocentes, provenga ésta de Hamas o de las fuerzas israelíes. Está absolutamente prohibida por el derecho internacional y constituye un crimen de guerra”.
En una declaración conjunta, los relatores especiales conminaron a un alto el fuego inmediato que sea monitoreado por un cuerpo internacional independiente.