La diputada, Lourdes Arrieta, se adelantó a la expulsión del partido La Libertad Avanza (LLA) y creó el monobloque Fuerzas del Cielo, espacio Liberal (FE), dentro de la Cámara Baja del Congreso. La parlamentaria generó serias incomodidades tras haber denunciado a sus compañeros de bancada, por la visita a represores alojados en el penal de Ezeiza.
«Armé un monobloque porque no puedo ser parte de un espacio en el que no me respetan. Todos mis compañeros de bancada se lavaron las manos, me dejaron sola. Tendrían que investigar a todos los que estuvieron conmigo en el penal de Ezeiza y que me usaron como carne de cañón», remarcó Arrieta.
Asimismo, la legisladora insistió en que fue “engañada” cuando sus pares la convocaron a hacer la visita al penal de Ezeiza. Insinuó que hay sectores que «pretenden impulsar iniciativas para favorecer a los represores detenidos por delitos de lesa humanidad».
Si bien mencionó algunos nombres, la diputada desligó al presidente Javier Milei y a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, del escándalo.
La diputada Arrieta formalizó su renuncia al bloque en una nota dirigida al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. Con su salida voluntaria desactivó la expulsión.
La parlamentaria reclamó una oficina en el palacio del Congreso, además de su despacho en el anexo de la Cámara; un “número de contratos necesarios para su permanencia y desempeño como diputada nacional».
