Lo que se sabe hasta ahora es que el 1 de enero Melina había salido a celebrar el año nuevo, que estuvo con un hombre integrante de la fuerza policía y que, por la madrugada, apareció muerta en el vehículo de éste. Desde la familia sostienen que se trató de un femicidio, sin embargo, aún no están claras las circunstancias de su muerte.
Por su parte, la persona señalada confirma que esa noche sí estuvo con ella y que mantuvo relaciones sexuales de manera consentida. Explica que en ese momento Melina comenzó a sangrar y, en cuestión de minutos, perdió la vida.
La familia de la menor reclama desde entonces que la Justicia determine cuál fue la verdadera causa del fallecimiento, ya que la jóven era una adolescente sin problemas de salud.
La autopsia determinó que Melina murió desangrada. En este sentido, Prueger sostuvo que si se hubiera desangrado en el lugar donde apareció muerta tendría que haber gran cantidad de sangre, pero eso no pasó.
“El cadáver no tiene sangre, tiene apenas dos o tres coágulos y, además de eso, no tiene sangre en las vísceras y en el lugar del hecho hay pocas manchas”, confirmó. Si hubiera muerto en el vehículo, especificó, “tendría que haberse encontrado entre entre un litro y un litro y medio (de sangre) lo que cubre una superficie muy grande y eso no está”.