La Policía de Ecuador ingresó por la fuerza a la embajada de México en Quito y arrestó al exvicepresidente Jorge Glas. Éste se encontraba recibiendo asilo político en el consulado azteca. En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó romper relaciones diplomáticas con el Gobierno de Daniel Noboa.
Las tensiones entre ambas naciones aumentaron desde que Glas solicitó refugio el 17 de diciembre. Y a partir de lo ocurrido en esta jornada parece no haber vuelta atrás en la crisis diplomáticas.
En este sentido, la canciller mexicana, Alicia Bárcena, anunció la ruptura de las relaciones y advirtió que denunciará a Ecuador en la Corte Internacional de Justicia. López Obrador, por su parte, calificó el hecho de «violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México».
Desde Ecuador justificaron la medida alegando un «abuso de inmunidades y privilegios» en la embajada. Imágenes difundidas muestran a la Policía entrando en la legación para detener a Glas.
Glas, condenado por corrupción , tenía una orden de prisión en Ecuador. La decisión de otorgarle asilo político tensó las relaciones bilaterales, agravadas por declaraciones de López Obrador sobre la violencia política en Ecuador.
El expresidente Rafael Correa criticó la acción y responsabilizó al actual mandatario ecuatoriano por la seguridad de Glas. Quien también repudió el accionar fue Cristina Fernández de Kirchner. En su cuenta de X escribió que esta situación “constituye una agresión sin precedentes en territorio americano”. Además, agregó que “vulnera tanto el derecho internacional como la tradición histórica de la República de México en materia de asilo político”.
Finalmente, se solidarizó con “el pueblo de México y su Presidente”.
La posición de nuestro país ante el accionar de Ecuador
La Cancillería argentina emitió un comunicado condenando la irrupción de la policía de Ecuador en la embajada de México en Quito.
En el comunicado, nuestro país, como Estado Parte de la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954, reafirmó su posición y llamó a la plena observancia de las disposiciones de este instrumento internacional, así como de las obligaciones que surgen de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
Se sumaron al repudio generalizado Chile, Colombia y Brasil. Al respecto expresaron su crítica por esta violación del derecho internacional, esperando una pronta resolución entre ambos países.