Pesa sobre Miguel Antonio Vega un pedido de captura nacional e internacional, luego de que se haya escapado en mayo de este año. El exprocurador de Concepción había sido condenado a la pena de 18 años de prisión por el homicidio del empresario panadero Carlos Oscar Chequer, en 2019. Ahora, el Gobierno de la Provincia ofreció una recompensa de $ 3.000.000 para quien aporte información fehaciente sobre su paradero.
El letrado se fugó el 17 de mayo de este año. Estaba cumpliendo arresto domiciliario en su estudio jurídico de Concepción, a la espera de que la sentencia quede firme. Cuando la notificación llegó, escapó sin dejar rastros. En el marco de esa investigación, quedó imputado su primo, José Adolfo Vega, a quien la fiscalía acusó de haber facilitado la evasión de su familiar. condenado por homicidio.
Mientras los peritos informáticos trabajan en la recolección de pruebas con el fin de probar complicidad entre ambos, el Gobierno ofreció una recompensa. Se trata de una suma de $3.000.000 para quien aporte datos fehacientes sobre el paradero del homicida fugado.
En este sentido, el Ministerio Público Fiscal ofreció como canales de comunicación la línea 3814473183. También se pueden contactar vía mails a complejosconcepcion@mpftucuman.gob.ar / fiscaliaregionalconcepcion@mpftucuman.gob.ar y la sede de la Unidad Fiscal, en España 1450, 1° subsuelo, Concepción, Tucumán.
El crímen del empresario panadero
Carlos Oscar Chequer, de 62 años, fue asesinado el 27 de febrero de 2019 en el garaje de su casa ubicada en el barrio Haimes de Concepción. Se trató, según las pericias, de un homicidio violento; su cuerpo estaba tirado, todo ensangrentado, a la par de su camioneta.
Los estudios forenses determinaron que recibió cuatro fuertes golpes en la cabeza que le ocasionaron la pérdida de masa encefálica. El arma mortal fue un trozo de madera, similar a un bate de béisbol.
Filmaciones de cámaras privadas ubicaron a Vega por la zona, con un objeto que llevaba en una de sus manos antes del homicidio. Luego se supo que ambos mantenían una enemistad.
Tras esa primera instrucción, el abogado fue señalado como sospechoso y posteriormente arrestado. El juicio luego lo señalaría como el autor material del crimen.
