El derrumbe de un edificio en demolición en la esquina de Corrientes y Catamarca causó conmoción, este viernes, en el centro tucumano. Seis personas resultaron heridas, aunque solo cuatro fueron hospitalizadas. Según informaron las autoridades del Hospital Padilla, ninguno reviste gravedad, aunque sí traumatismos varios.
Los peritos de Defensa Civil y Catastro municipal trabajarán durante los próximos días para conocer el motivo que generó el derrumbe de un edificio de, al menos 80 años, que se encontraba en proceso de demolición. Desde el municipio capitalino afirmaron que la firma cuenta con el permiso correspondiente para demoler la estructura.
Incluso, según deslizaron los funcionarios de San Miguel de Tucumán, la empresa contaba con un plan de contingencia ante cualquier eventualidad.
Sin embargo, el titular de la Unión de Obreros de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), David Acosta, sostuvo que la empresa tenía en malas condiciones a sus empleados. «De los cuatro que fueron internados, tres están en negro. No tenían botas ni arneses», dijo.
En relación a los pacientes que fueron trasladados al Padilla, se informó que ninguno presenta traumatismo de cráneo. Esto significa que todos se encuentran fuera de peligro, aunque sí se observaron algunos traumatismos, por ejemplo, de tórax.