Boca Juniors ganó por 3-2 el Superclásico del fútbol argentino y avanzó a las semifinales de la Copa de la Liga Profesional. Dejó en el camino a River, su eterno rival, en un partido vibrante jugado en el estadio Mario Alberto Kempes, de la ciudad de Córdoba. Después de años, la hinchada xeneise cantó victoria frente a los simpatizantes millonarios.
Desde temprano, miles de hinchas de River y de Boca rodearon las instalaciones del estadio para vivir el Superclásico. Algunos con entrada en mano, otros solo empujados por la esperanza de ver llegar a sus ídolos. Minutos después de las 12 se abrieron las puertas. A las 15.20 entraron los equipos, se saludaron los jugadores, el árbitro miró el reloj, pitó y comenzó la fiesta.
A los nueve minutos del primer tiempo los dirigidos por Martín Demichelis se pusieron en ventaja con el gol de Miguel Borja tras un contragolpe aprovechado por Claudio Echeverri. La diferencia se mantuvo hasta cinco minutos antes de que concluya la primera etapa. A los 46 minutos, Miguel Merentiel igualó el marcador.
En la segunda parte del Superclásico a River le anularon un gol a los seis minutos. El línea lo había habilitado, pero luego el VAR hizo dar marcha atrás y el partido continuó 1-1.
A los 16 minutos Edinson Cavani supo al xeneise arriba en el marcador. Y a los 21, otra vez Merentiel, hizo el tercero para los dirigidos por Diego Martínez.
En el alargue, Paulo Díaz achicó la ventaja, pero el tiempo no alcanzaba. Boca se quedó con el Superclásico en un estadio lleno y ahora deberá enfrentar a Estudiantes de La Plata en las semifinales.