El actual intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro, denunció una situación «inusual» durante las elecciones del domingo pasado en la provincia y solicitó a la Junta Electoral Provincial la apertura de todas y cada una de las urnas.
«Respecto a las supuestas falencias en los certificados y actas de escrutinio, en el cerrado de las urnas y cualquier otra cuestión referida a inconvenientes puntuales en la actuación de las autoridades en las mesas a su cargo dichos planteos deberán ser realizados en cada caso en oportunidad del escrutinio definitivo», respondieron desde la Junta Electoral.
Asimismo, precisaron: «En relación al escrutinio provisorio, le recordamos que el mismo es una herramienta informativa carente de relevancia en la faz jurídica».
«Esta Junta Electoral Provincial ante cada pedido realizado por los fiscales de los diferentes partidos, frentes y/o alianzas se avocó a su tratamiento, disponiendo en las ocasiones pertinentes la apertura de las urnas», comunicaron.
Desde la Junta Electoral Provincial añadieron: «Sin embargo, en la mayoría de las mesas de escrutinio la sola lectura del acta y/o certificado resultó suficiente para aprobarla, acto que fue consentido por los fiscales intervinientes mediante la suscripción de la misma, incluidos los del Partido que representa el presentante».
«Por lo expresado, ninguna de las denuncias formuladas tiene la entidad suficiente para derribar el decisorio antes citado (Resolución N* 335/2023 H.J.E.P. E), debiendo los planteos de apertura de urnas formularse en cada mesa de escrutinio. Por lo tanto, no ha lugar lo peticionado por el presentante», concluyeron.
Con 203 mesas escrutadas, la candidata a intendenta de la Capital por el Frente de Todos, Rossana Chahla, amplió la sobre la postulante de Juntos por el Cambio, Beatriz Ávila. La Diputada Nacional obtuvo el 44,03% (25.445 sufragios) contra el 38,35% (22.163) de la Senadora Nacional.